Antes de convertirse en un amargado rompepelotas tras el excelente “Batman, el señor de la
noche”, las aventuras del hombre murciélago tenían un indiscutible encanto, un
aura de misterio detectivesco entremezclado en ocasiones, con el terror más directo. Estos dos retapados no solo fueron
los primeros tebeos de Batman que adquirí, sino que además contienen dos de las
mejores historias del personaje, hasta hoy (incomprensiblemente) no reeditadas
en nuestro país: la aterradora saga vampírica con dibujos de Gene Colan y el
soberbio anual 8 (El mesias del sol carmesí) que supone, nada menos que el
primer encuentro entre el caballero oscuro y una tal Lynn Varley.
No hay comentarios:
Publicar un comentario